Madrid respira. Y lo hace después de un fin de semana en el que las temperaturas han sido mucho más livianas. La capital dice adiós a la ola de calor y afronta una semana en la que el mercurio marcará cifras propias de principios de verano. Los termómetros alcanzarán los treinta y dos grados y no bajarán de los dieciocho grados este lunes, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). No se ha establecido aviso alguno por altas temperaturas durante la jornada del lunes, después de varias semanas en las que la alerta amarilla y naranja ha sido constante en varias zonas de la región durante las horas centrales del día.
Con este importante descenso de las temperaturas, los madrileños tendrán a su disposición una mayor oferta de planes al aire libre. Un paseo por El Retiro se convierte en el mejor aliado para muchos cuando se acerca la noche, las terrazas de los bares también agradecen este respiro en los termómetros.
Una persona sentada a la sombra en un parque. / Ricardo Rubio – Europa Press / Europa Press
Estabilidad de cara al martes
La AEMET ha pronosticado temperaturas máximas de treinta y cuatro grados para este martes, dos grados más que la jornada del lunes. Las mínimas también aumentan, lo harán hasta los diecinueve, un grado más que el lunes. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) no aplica ningún aviso por altas temperaturas, que venían siendo habituales durante las últimas semanas en la capital de España. Será una jornada con cielos despejados o poco nubosos durante gran parte del día y no se atisba riesgo de precipitaciones.
Las temperaturas acompañarán durante el resto de la semana, donde las máximas no superarán los treinta y cinco grados de la jornada del viernes. A partir del domingo, Madrid podría experimentar una nueva subida de las temperaturas, recuperando datos más propios de esta época del año. Mientras tanto, los madrileños, especialmente en zonas de la sierra, podrán disfrutar de unos días mucho más llevaderos antes del comienzo del mes de agosto.