Sánchez defiende la amnistía como el ‘camino más seguro’ para la unidad de España

Pedro Sánchez ha tardado más de 40 minutos en entrar de verdad en su proyecto de gobierno. Para dejar claro cuál es la alternativa a su coalición con Sumar apoyada por el soberanismo e independentismo catalán, vasco y gallego, el líder socialista ha comenzado su discurso en el debate de investidura extendiéndose en los pactos del PP con Vox en comunidades autónomas y ayuntamientos, presentando al Ejecutivo central como el “único muro” frente a una “ola reaccionaria” que puede “acabar socavando la democracia”. Sentadas las bases, el presidente en funciones, que será reelegido el jueves por mayoría absoluta, ha pasado a centrarse en los avances sociales que proyecta para los “próximos cuatro años”, asegurando que el suyo será un Gobierno “estable”, pese a que no hay una mayoría de izquierdas en el Congreso, y dejando para el tramo final el aspecto más polémico de su investidura: la

Salir de la versión móvil