Una de las películas españoles más destacadas de la pasada temporada fue Te estoy amando locamente, el debut en el largometraje del malagueño Alejandro Marín, una dramedia, un relato agridulce que recuerda cómo nació el movimiento LGTBI andaluz (curiosamente, lo hizo en el seno de la Iglesia). La película fue lo que en el sector se llama un sleeper, un éxito desde la modestia y el boca-boca, cosechando una taquilla de impresión y arañó unos cuantos galardones en la temporada de premios. La lucha por la igualdad desde las otras sexualidades tiene enjunda, historias y protagonistas y está claro que interesa, así que se encuentran en plena producción y postproducción algunos proyectos que ahondan en esta memoria, que, además, tocan directamente a la Costa del Sol, territorio fundamental del movimiento.
La directoria albaceteña Sonia Bautista-Alarcón acaba de terminar el rodaje de [No] Body, un cortometraje en la que rinde homenaje a las personas represaliadas por su condición sexual, con el foco puesto en la Gran Redada del Pasaje Begoña en Torremolinos en 1971. La de nuestro Stonewall es una historia es bien conocida: un oasis de libertad, con algunos de los primeros establecimientos para público LGBT español y frecuentado por celebrities como John Lennon o Massiel, que sufrió una contundente redada, con 300 identificaciones y casi 120 arrestos por ‘atentar contra la moral y las buenas costumbres’. Pero no se ha contado tantas veces como debería. Ahora, la realizadora pretende recuperar estos hechos para ‘intentar sensibilizar a la audiencia sobre la importancia de respetar la diversidad y las elecciones individuales, rescatando esa memoria de aquellos que han sufrido represión y violencia en contextos sociales y políticos hostiles’, asegura.
[No] Body, que mezcla ficción con hechos históricos de manera documental (incluye material Súper 8 de archivos domésticos de diferentes familias), está protagonizada por Juan López-Tagle, Eulalia Ramón y Celeste González y con la colaboración especial de Vicente Gil y Raquel Guerrero. Lo bueno: el cortometraje está apoyado por la Asociación del Pasaje Begoña y la Fundación Manolita Chen. Lo menos bueno: si ya nos estamos cansando de películas y series sobre Marbella rodadas en Canarias (por aquello de los mayores incentivos fiscales en las islas), esta historia tan universal pero torremolinense fue rodada en Benidorm (el proyecto fue seleccionado por el Skyline Benidorm Film Festival, dentro de su selección de películas en desarrollo: para participar es indispensable que al menos el 50% del rodaje se lleve a cabo en Benidorm).
Desirée Vogue conversando con el filósofo Juan Gavilán para el documental 'Arcoiris en blanco y negro'. / LA FRAGUA / KANDALE
Documental
Paralelamente, el productor malagueño Kike Mesa está culminando Arcoiris en blanco y negro, un alegato del director Fran Campos sobre la capitalidad de Torremolinos para la entrada de la modernidad en nuestro país. Recordemos que hace unos años, en 2021, Rafael Robles, Rafatal, estrenó Una isla en el desierto, un documental que recupera las huellas y testimonios del despegue turístico de Torremolinos y la Costa del Sol, que significó además una burbuja de libertad y tolerancia dentro de la dictadura. Ahora, Mesa y Campos pretenden ‘narrar la crónica del movimiento LGTB en el municipio, una relación que ha pasado por dispares momentos y escenarios, desde sus incipientes comienzos a su transformación en ciudad icono de la cultura homosexual, pasando por la bochornosa redada del Pasaje Begoña’.
‘Éste es un lugar lleno de color, lleno de luz y de arte; un lugar creado a partir de miles de historias, un lugar cambiante y libre, un lugar famoso y a la vez desconocido. Fue un oasis de libertad en una época privada de ella, un arcoiris en blanco y negro’, dice Desirée Vogue, actriz, vedette y drag queen popular por su participación en la serie Veneno, que ejerce de maestra de ceremonias del documental. Por las cámaras de Fran Campos y en diálogos con Vogue pasarán los diseñadores Victorio & Lucchino, el filósofo y antropólogo Juan Gavilán Macías, la activista Carla Antonelli y la actriz, monologuista y cantante Xenon Spain, entre muchos otros.
Seguro que los de Sonia Bautista-Alarcón y Kike Mesa y Fran Campos no serán los únicos ni últimos ejercicios de memoria histórica LGTBI. Porque queda mucho, y muy interesante, por contar en la pantalla sobre una lucha que es la de todos y todas.