El devastador incendio que sacudió a la catedral de Notre Dame en 2019 no sólo marcó un antes y un después en la historia de este emblemático monumento parisino y en el patrimonio de Francia, sino que, contra todo pronóstico, ha desvelado secretos que permanecieron ocultos durante siglos. Los trabajos de restauración han llevado a descubrimientos arqueológicos que parecen sacados de una película de aventuras.
Un viaje al pasado bajo los cimientos de Notre Dame
Los arqueólogos se han topado unos tesoros que abarca 2.000 años de historia. Entre los hallazgos destaca una vivienda del siglo I a.C, ubicada a más de tres metros bajo tierra, y monedas galas de esa misma época. Estos descubrimientos no solo confirman la ocupación continua del lugar desde la antigüedad, sino que también arrojan nueva luz sobre la evolución cultural y arquitectónica de París.
Además, se identificaron restos de un edificio carolingio de 30 metros de largo, una estructura que precede a la catedral gótica actual. Según el arqueólogo Christophe Besnier, quien lidera las excavaciones, cada capa del terreno revela una historia única: ‘Hemos recogido indicios de casi todos los periodos. Vamos a poder reconstruir más de 2.000 años de historia en esta parte de la ciudad’, explica al medio francés France 24.
Los arqueólogos están eufóricos: "Es un privilegio reconstruir más de 2.000 años de historia" / CHRISTOPHE PETIT TESSON / POOL / REUTERS
El cancel del coro: una joya medieval rescatada
Uno de los descubrimientos más impactantes es el cancel del coro del siglo XIII, una tribuna de piedra decorada con esculturas que formaba un cerco entre el coro y la nave. Este elemento, desmantelado en el siglo XVIII, se creía perdido para siempre. Sin embargo, los arqueólogos han recuperado cerca de 1.000 fragmentos, incluyendo 700 que conservan restos de su policromía original.
Según el arqueólogo Damien Berné, citado también por France 24: “La policromía nos muestra lo que la gente veía al enfrentarse a estas esculturas antes de que el tiempo borrara sus colores”. Actualmente, fragmentos del cancel se exhiben en el Museo de Cluny de París.
Pese al trágico incendio de hace cinco años, este facilitó el acceso a áreas que antes permanecían inaccesibles. La historia de Notre Dame no solo ha sido preservada, sino que continúa creciendo con cada descubrimiento. El emblemático monumento todavía guarda secretos por revelar, consolidándose como un auténtico tesoro para la historia.