El ‘castigo’ del Ministerio de Transportes y Audasa al área de Vigo no cesa con el nuevo año. Las nuevas tarifas de la Autopista del Atlántico anunciadas el pasado martes por la tarde no solo vuelven a situar a los tramos alrededor de la ciudad como los más caros de toda España en proporción a la distancia recorrida, sino que aumentan su diferencia con el resto del vial que vertebra la Galicia atlántica.
El ministerio fijó en un 5,34% el alza permitida a partir del 1 de enero, teniendo en cuenta la suma de la inflación y el canon anual que Audasa aplica por las obras de ampliación ejecutadas hace una década. Esta proporción se ha dejado notar en todos los trayectos habituales desde Vigo hacia el resto de urbes gallegas: A Coruña supera la barrera de los 20 euros (20,45) al subir un 5,41%, Santiago los 12,05 euros con un 5,24% o Pontevedra los 4,85 (+5,43%) lo que supone pagar 20 céntimos en cada kilómetro recorrido. La menor subida, de apenas el 5,11%, se da entre estas dos ciudades. Esta disparidad se debe al ‘redondeo’ aplicado por Audasa a múltiplos de cinco en los decimales, lo que impacta aún más en los trayectos más cortos.
Nuevas tarifas de los peajes de la A-9. / H. Barreiro
Este es el caso de las tres relaciones de ‘proximidad’ que dependen de la AP-9 para vertebrar el área metropolitana viguesa. Solamente el trayecto hasta O Porriño, que queda en un precio exacto de dos euros por evitar el paso por las curvas de Tameiga en la A-55, tiene una subida similar: 5,26%. En el mismo itinerario hacia el sur el coste escala un 6,37% hasta los 3,40 euros entre Puxeiros y Tui.
Los dos casos más sangrantes llegan precisamente donde no hay una infraestructura alternativa a la Autopista del Atlántico: Redondela y O Morrazo. En el primer caso el ‘tarifazo’ aplicado por Audasa con el visto bueno del Ministerio de Transportes es del 9,09%, casi el doble que en el resto de la red. Esto se debe al salto de diez céntimos hasta los 1,20 euros en el peaje hasta Cabanas, en las inmediaciones de Chapela. En caso de haber sido de la mitad (5 céntimos más) la subida habría sido similar a la del tramo O Morrazo-Pontevedra, donde es del 4,45%.
El segundo caso hacia Moaña y Cangas es más complejo ya que no afecta directamente al usuario pero sí a los ingresos de la concesionaria. El peaje en la sombra por cruzar el puente de Rande escala a 1,40 euros, un 7,69% más que durante el 2024. Esta tarifa ha sido ocultada dentro de la información pública de Audasa, quien cobra del Gobierno este importe en virtud del Real Decreto 633/2006 en el que los ejecutivos de Zapatero y Touriño ’liberaron’ el peaje de Domaio tras años de protestas vecinales. El importe, en resumen, resulta de la diferencia entre el precio de Vigo a Pontevedra y el trayecto solo desde la salida 147 de la autopista.
Todos estos cálculos se realizan con los precios fijados para turismos ligeros. Si se recorre toda la vía, desde Tui hasta Ferrol, el incremento porcentual es algo menor, del 5,29. En contante: esos casi 220 kilómetros valen ya 26,85 euros, 1,35 más que el recién finalizado 2024.
Nuevas bonificaciones
Precisamente estos tramos afectados por un mayor incremento porcentual de su precio son los que ha tratado de blindar el Ministerio de Transportes para los usuarios recurrentes que, además, gocen del dispositivo de telepeaje. En esta modalidad de pago, la más habitual actualmente, se pueden lograr bonificaciones de hasta el 87,5% en los viajes hacia O Porriño y Tui, si bien los precios generales siguen siendo los más caros de toda la red estatal de carreteras.
En la nota difundida a última hora del día 31 el Ministerio de Transportes destacaba el mecanismo de freno aplicado a estas subidas que ha dado vigencia al tope del 4% implantado en 2023. De esta forma los viajeros están pagando ahora un sobrecoste de forma escalonada que continuará hasta 2026 para abonar lo ‘ahorrado’ hace dos ejercicios.
‘De no continuar en 2025 con las subvenciones ya previstas, el alza de los peajes habría sido del 7,56%’ en la AP-9, destaca el organismo, quien cifra en 60 millones el ahorro para todos los usuarios. A ello se suman las nuevas bonificaciones aprobadas por el Consejo de Ministros a finales de diciembre y que en el caso de la AP-9 supondrán un descuento (que ingresará Audasa) de 27,6 millones de euros.